Según la cadena de centros de salud y belleza Templo del Masaje (www.templodelmasaje.com) los tratamientos terapéuticos o de relax no sólo no se han resentido en época de crisis, sino todo lo contrario: más que una visita puntual, suponen un componente irrenunciable del estilo de vida de cada vez más ciudadanos, que lo emplean para combatir la depresión y las preocupaciones o los dolores físicos causados por malas posturas, estrés, etcétera.
La cadena de centros Templo del Masaje, única del sector que aúna tratamientos de belleza con masajes terapéuticos y relajantes en un mismo establecimiento, está de enhorabuena: este año cumple su primera década atendiendo el cuidado y la salud de sus fieles clientes. Y este calificativo de su clientela no es caprichoso: de las más de 10.000 personas que han pasado “por sus manos”, nunca mejor dicho, alcanzan casi el 50% desde su origen.
Aquél no tan lejano 2005 supuso el inicio de una aventura empresarial que con el correr de los años y la experiencia adquirida ha devenido en una novedosa propuesta de negocio franquiciable, y que ya cuenta con tres locales funcionando en diversos puntos de la capital madrileña. «Cuando en 2009 firmamos la primera franquicia, en la madrileña calle de Ferraz, estábamos un poco preocupadas», rememora Maribel Corpa, una de las tres socias fundadoras. «El entorno económico de desaceleración ya era evidente, pese a que en nuestra central del Barrio del Pilar nos iba de maravilla. En 2013, en lo más duro de la recesión y los ajustes, inaugurábamos nuestra segunda franquicia en Pozuelo, demostrando que nuestro sector, sin ser inmune a la crisis, sí tiene un componente vital y sociológico al que nadie le gusta renunciar, y que es una tendencia que se va generalizando en amplias capas de la población: el cuidado personal, tanto en belleza como en salud».
Dos años después, Templo de Masajes cumple su ciclo y está a punto de abrir su tercer centro en las inmediaciones de la calle de Goya, en el madrileño Barrio de Salamanca. «Nuestro ritmo de aperturas ha sido muy sosegado, merced a una implicación total en cada proyecto, apoyando al franquiciado en todos los aspectos operativos, desde la búsqueda de local a la formación del equipo», continúa Maribel Carpa. «Nuestro concepto de basa en una elevada cualificación de las masajistas y esteticistas, formadas en muy diversas técnicas, con el fin de que los clientes puedan encontrar un servicio integral de alto nivel dentro del mismo local, que les brinde una satisfacción plena».
El cuidado personal no tiene por qué ser un lujo ocasional. Templo del Masaje apuesta por democratizar sus servicios y pone a disposición del público el más variado surtido de técnicas de masajes, a fin de que cada cual pueda encontrar el que mejor se adapte a sus necesidades; desde los descontracturantes hasta los de relajación, y desde los reafirmantes a los más específicos. Para ello dispone de abonos y una moneda propia, el “templo”, que posibilita abaratar cada sesión y combinarlos con distintos servicios estéticos, desde la depilación a la manicura-pedicura, desde los tratamientos faciales y corporales hasta la acupuntura o la moxibustión.